Una noche con BFlecha y Dj Nigga Fox

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Foto de Julio Albarrán (cc)

Un evento como ZEMOS98, que intenta cubrir varios campos artísticos y culturales desde lo audiovisual a las experiencias colectivas desde un punto de vista ecléctico y personal, acierta al programar dos propuestas tangencialmente opuestas pero igualmente carismáticas para la noche del viernes 11 de abril: BFlecha y DJ Nigga Fox desembarcaron en el centro de Sevilla, en el Teatro Duque – Sala La Imperdible, para presentar dos ángulos electrónicos que tienen la frescura y la experimentación como denominadores comunes.

El proyecto de la gallega Belén Vidal es de los que resulta casi imposible trasladar al directo o encima del escenario con cierta fidelidad: BFlecha es por naturaleza un híbrido que recoge y conforma su ADN de diferentes fuentes, tales como el Pop, Hip Hop, la beat-construcción de estética maximalista, el R&B, la música de baile primigenia como el House más positivo y simple, así como la era Tecno-Pop en nuestro país o la siempre presente referencia dirigida a la ciencia-ficción. En cualquier caso, tanto la puesta en escena de la artista como su arsenal de rasgos presentados detrás de su maquinaria, cumplen sobradamente las expectativas: a medio camino entre un planteamiento práctico y dinámico, BFlecha sabe explotar sus virtudes y revelar a los asistentes parte del inmenso trabajo que ha llevado perfilar su discurso.

Vestida en color cobre, con sus Air Jordan y el guante de cuero en la mano izquierda como homenaje a Michael Jackson, Bflecha tanto se encamina a una jam a bordo de su Roland Juno como incorpora detalles a las bases parcialmente pre-grabadas; dos micrófonos, un módulo de efectos vocales y una Akai MPC configuran parte de su hardware en vivo, el que le otorga múltiples posibilidades en cuanto a desarrollo, reducción o remodelación de los cortes principales de βeta : sonaron "A Marte", "B33" o la bellísima y luminosa "Reflejos", entre otras, conservando gran exactitud con las originales y siempre bajo las luces de neón y un buen control de la iluminación.

Después de un directo de BFlecha, la atmósfera que dejan los 45/50 minutos es de gran calidez y satisfacción: no solo has visto a uno de los proyectos más genuinos crecidos en nuestra geografía, también te has entretenido, ya sea atendiendo a las canciones u observando a la artista configurando cada elemento de los mismos en tiempo real. DJ Nigga Fox lo tenía fácil, pero tampoco chupado: de origen angoleño y residente en Lisboa, es una de las puntas de lanza del nuevo movimiento electrónico nacido en los barrios más emprobrecidos de Portugal, donde algunos productores y DJs muy jóvenes (DJ Pausas, DJ Marfox, etc) están fundiendo ritmos tradicionales como la Kizomba, la Tarraxinha o el Kuduro con parámetros estructurales más "europeos", por así decirlo, utilizando unos recursos realmente austeros como un Fruityloops y un PC.

Sonó mucho material de Príncipe Discos y del proyecto paralelo de Nigga Fox, LX Monkeys: alternando House, segmentos tribales y de gran acento africano, con ritmos sincopados y de gran frenetismo, el artista consiguió que no descendiera la euforia después del concierto y convirtió el Teatro en toda una fiesta. Aunque hubo bajones y algún bache técnico, el clima no desmejoraron y la noche del viernes cumplió sus objetivos: traer a Sevilla dos conceptos distantes pero innovadores dentro del panorama electrónico de hoy.

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