11.04.2014 por
Foto de Julio Albarrán (cc)
¿Estáis por aquí de vacaciones? ¡No se puede estar siempre de panchis! Hay que trabajar mañana. No como esos parados a quienes estamos manteniendo con nuestros impuestos.
Esto fue parte de una conversación no muy cómoda que tuve ayer con dos hombres mientras cenaba en un restaurante del barrio de Triana. Uno de ellos me miraba con desprecio y decidí permanecer en silencio. Pero esta conversación que sucedió en mi espacio personal e íntimo, es algo “político”, por eso escribo.
Y justamente Lo doméstico es político fue el nombre que recibió la segunda jornada intensa de Remapping Europe, en la 16 edición del Festival ZEMOS98, en donde activistas, periodistas y entusiastas nos juntamos a hablar sobre lo doméstico que es donde están “las mujeres, los niños y los esclavos” del neoliberalismo y del (neo)colonialismo. “Lo doméstico que retoma la idea del movimiento feminista de los años sesenta”, como explicó Lena Rogowska. Lo doméstico donde parimos, abortamos, migramos, deseamos, nos cuidamos, nos sentimos, amamos, decidimos y compartimos. Porque la reproducción y los cuidados son también fuerza de trabajo y son la macroeconomía en el sentido cualitativo del poder.
Durante la presentación de su Código Fuente Audiovisual, una charla en el Teatro Central de Sevilla, Ayşe Akalın nos habló de los trabajos que se hacen desde espacios invisibilizados que también mueven dinero. Donde las mujeres migrantes viven una doble discriminación que las sitúa por debajo del umbral de la ciudadanía, por ser mujeres y por ser migrantes. Por eso lo político no solo está en el espacio público, sino en esos espacios invisibilizados, negados, no nombrados, que en este ZEMOS98 quisimos hacer visibles.
Ayşe Akalın proyectó algunos audiovisuales que explican la situación de las mujeres trabajadoras domésticas. Nos contó su historia personal, la memoria familiar que es la memoria social de tantas otras que han optado por emplear en Turquía a mujeres moldavas para que se hagan cargo de los cuidados que no pueden asumir. Polacas en Roma, dominicanas en Nueva York, filipinas en Hong Kong o ucranianas en Polonia; todas trayectorias de mujeres que se mueven desde países empobrecidos hacia los países enriquecidos para hacerse cargo de los trabajos de cuidados.
En la misma línea, el trabajo audiovisual My ukrainian , realizado por Krzysztof Janiak, ilustró los imaginarios dominantes que la clase media polaca ha construido sobre las mujeres ucranianas que ayudan a sostener los hogares.
My Ukrainian - Krzysztof Janiak [Remapping Europe] (EN) from towarzystwo inicjatyw twórczych on Vimeo.
¿Por qué en el Festival ZEMOS98 estamos hablando de remapear Europa? La conversación doméstica que he citado al principio de este texto, a la que muchas mujeres cruzadas por las migraciones nos hemos enfrentado, forma parte del imaginario que se construye de manera individual sobre “los panchitos” - forma despectiva que en España se usa para referirse a los/as migrantes de origen latinoamericano.
El Festival ZEMOS98 intenta desmontar ideas preconcebidas como estas que los medios hegemónicos difunden y que se naturalizan. Esto es una manera de remapear las miles de imágenes dominantes que están constantemente reproduciéndose a través de frases, eslóganes, propagandas, nuevas redes sociales, publicidad o medios masivos como el cine.
Voces como la de Aída Quinatoa, ecuatoriana en Madrid, afectada por la hipoteca, intentan subvertir las formas que predominan en la esfera pública mediática. Su voz es el eco de muchas otras voces que se levantan. De esta forma dice: “nos toca luchar aquí pero también nos toca luchar en nuestros países”.
Lo político, tal como ayer reflexionamos, existe cuando tenemos deseos de estar, participar, cooperar, decidir y debatir con los demás. Cuando nos organizamos en grupos, creamos portadas, encabezados, artículos e inventamos periódicos sobre la economía de los cuidados: “Economía diaria” o “La Tribuna Holística”. Cuando los “bancos de tiempo” nos financian y una trabajadora del hogar sea nuestra “Ministra de Economía Diaria”.
Lo político es remezclar, resignificar, renombrar Europa; cortando, pegando, coloreando, descolonizando, despatriarcalizando, desneoliberalizando y haciendo algo por un interés en común que solo puede ser aquí y ahora. Así, algunas de las frases que escribimos ayer decían: “delegar tareas requiere confianza”, “la macroeconomía son las cualidades de la microeconomía”.
Remapping Europe es des-eurocentrar las coordenadas de nuestro lugar que está en continuo movimiento, ampliar los imaginarios que velan nuestras miradas y hacer uso de la herramienta más política que tenemos que es nuestra propia capacidad de inventar y nuestra capacidad de crear.
Streaming de Lo doméstico es político, Código Fuente Audiovisual de Ayşe Akalın